La impermeabilización en todo tipo de estructuras brinda protección a las zonas interiores, por lo que es un paso fundamental que no puede olvidarse. En el caso de los edificios, al poseer la habilidad de contener un mayor número de personas que una vivienda normal y debido a la estructura de la misma, el mantenimiento de sus muros es crucial. A continuación te explicamos la importancia de impermeabilizar edificios y sus beneficios.
¿Por qué impermeabilizar?
Las impermeabilizaciones protegen las superficies de las edificaciones, ayudan a proteger del desgaste de las condiciones externas y minimiza los riesgos de humedad o filtraciones de agua a los interiores. Algunos colores de materiales impermeabilizantes ayudan a regular las temperaturas dentro del edificio, la elección depende si quieres retener el calor, disminuirlo o brindar un visual estético sin mejora térmica. Si no aplicaste un impermeabilizante durante el proceso de construcción, puedes contratar un servicio que lo aplique posteriormente, considera hacerlo en la brevedad y no cuándo comiencen a haber desperfectos en las superficies.
Tipos de impermeabilización
Las edificaciones pueden ser impermeabilizadas de forma externa, interna o de cubierta. La impermeabilización externa se aplica precisamente en las superficies exteriores del edificio, como cimientos, paredes o techos y su función es evitar que el agua se filtre hacia el interior. En el caso de la interna, puedes verlos en sótanos, paredes o similares y se aplica en las zonas internas de la estructura para evitar que en caso de fugas interiores haya daños a otras partes. La impermeabilización de cubiertas se aplica en los techos y su finalidad es evitar que la lluvia o goteras de tinacos se filtren desde arriba al interior.
Beneficios de impermeabilizar
La impermeabilización protege las estructuras del polvo, el agua, el moho o el debilitamiento del paso del tiempo, ayuda a ahorrar energía con la regulación termodinámica, pues disminuye el uso de calentadores o ventiladores en las épocas de invierno y verano. Un edificio con un buen mantenimiento mantiene también el bienestar de sus ocupantes y aumenta el valor de la propiedad.
Mejorar la estética con impermeabilizantes
Si prefieres la estética del edificio a los añadidos termodinámicos, existen colores de impermeabilización que pueden armonizar con la estructura de la construcción o las que están alrededor. Tal es el caso de los colores grises que disminuyen la visibilidad de suciedad en cubiertas, el rojo o el negro que armonizan en lugares donde hay un grupo de estructuras similares o el transparente que no altera la visión de la superficie.